Privacidad

Hay varias precauciones que los usuarios pueden poner en práctica para su autocuidado y protección de su privacidad. Aquí se presentan algunas buenas prácticas.

Cuando estás online, tu información queda registrada en muchas partes, dejando un “rastro digital” en la forma de “cookies”, datos de GPS, mensajes sociales, intercambios de correos electrónicos entre otros. Es un asunto crítico aprender a protegerse y cuidar la privacidad. Tu identidad e incluso la cuenta de tu banco podrían estar en riesgo.

• Utiliza contraseñas largas y complejas: Esto a menudo es nuestra primera línea de defensa cuando protegemos nuestras cuentas. El tamaño y la complejidad de las contraseñas pueden proveer un nivel extra de protección a nuestra información personal.
• Tener cuidado con lo que se comparte: Periódicamente chequear las configuraciones de privacidad de tus redes sociales para asegurar que compartes lo que deseas y con quien deseas. Ten cuidado al compartir información personal porque lo que ingresa a internet usualmente se quede ahí.
• Ser sigiloso cuando se navega por internet: Tu navegador de internet puede almacenar una gran cantidad de información sobre tus actividades online, incluyendo cookies, páginas visitadas e historial. Para asegurar la privacidad de tu información personal en internet, limita el acceso a esta conectándote de forma “incógnita” utilizando tu navegador en modo privado.
• ¿Usas WiFi?: Si solo encuentras redes WI-FI públicas, restringe tu actividad a búsquedas simples (nunca ingreses a un banco en línea) o utiliza una VPN. Esta última provee un túnel encriptado entre tú y el sitio que visitas.
• ¿Debo creer en las aplicaciones para mi teléfono?: Utiliza aplicaciones de fuentes confiables. Revisa los comentarios de otros usuarios u otras fuentes antes de realizar la descarga de aplicaciones que te son desconocidas.